El equipo del CIFP Mendizabala LHII está trabajando duro en la incorporación de diferentes innovaciones en distintas áreas: la dirección, los frenos, las suspensiones y el chasis del monoplaza con el que competirán próximamente.
En relación a la dirección, se ha optado por una configuración directa sin uniones cardanes ni cremallera. Esta elección se basa en varios factores: su ligereza, facilidad de fabricación y, lo más importante, los excelentes resultados que han obtenido.
El chasis está construido con un tubular de acero proporcionado por su patrocinador, Protubsa.
Para las ruedas, se han utilizado llantas de 10 pulgadas provenientes de una moto Vespino. Además, los neumáticos cuentan con un dibujo especial para mejorar la tracción en condiciones climáticas adversas, como la lluvia. Con el fin de reducir el peso del vehículo, se ha elegido tapacubos y llantas de aluminio.
En cuanto al sistema de frenado, se han realizado también mejoras significativas. Este año, para adaptarse a la competición de Euskelec, se han elegido frenos de moto, lo que permitirá tener un mayor control y seguridad durante las pruebas.